Una historia de Asesinato, Intriga, Irracionales y Fibonacci
Todo comenzó como de costumbre. Un cliente estaba interesado en un logo para su compañía discográfica de música llamada Irrational Records. Siendo un fanático de la secuencia de Fibonacci, al igual que yo, quería que su logo rindiera homenaje a la proporción áurea. Lo que siguió puede describirse como adentrarse en el agujero del conejo blanco al que persiguió Alicia antes de enfrentar su propio mundo de locura.
Comenzamos a hablar, como se suponía que debía ser, sobre su empresa, sus intereses y el enfoque que quería darle al negocio. Lo habitual. Me llamó la atención el nombre que decidió darle a su compañía, "Irrational", y le pregunté si estaba familiarizado con la historia de ese matemático pitagórico y músico teórico: Hípaso...
Él dijo que no... 🧐
Hombre, qué me han dicho?!...
Sostén mi 🍺
Hípaso es el descubridor de los números irracionales, decimales infinitos sin dígitos que se repiten indefinidamente, y también era inventor y músico teórico por afición. Este tipo era realmente algo.
Se rumorea que la sociedad secreta pitagórica estaba en busca de conocimiento supremo, y su concepción del cosmos y la vida se basaba precisamente en números.
Sin profundizar mucho en los detalles, solo diré que mi compadre Hípaso, con su descubrimiento de los números irracionales, llegaría a sacudir los cimientos mismos de todo lo que creían o consideraban legítimo en su sociedad secreta. Querían silenciarlo. Un secreto dentro de un secreto. Una verdad oculta al seguir buscando la verdad.
Se ahogó en el Mar Mediterráneo de su amada Grecia. Dicen que fue inevitablemente dirigido por las manos de sus compañeros de tantas reuniones sobre el funcionamiento del universo.
Así que mi cerebro, nadando a mil por hora, llegó a la conclusión de que la compañía de mi cliente bien podría rendir homenaje a quien murió en la infamia temprana, ahogado en el mar en lugar de bañado en la gloria.
El logo tendría el rostro de Hípaso
En perfil, mirando hacia la izquierda. Demostrando que con su descubrimiento, le dio la espalda a lo que la sociedad pitagórica concebía como lo real. Muerto (con los ojos cruzados) con ceño fruncido en un gesto de perplejidad y tristeza. Su larga barba, tan común entre los hombres de la época en Grecia, con círculos y ondas como si lo llevaran las cálidas mareas del Mediterráneo que le dieron la última morada. Todo lo anterior incrustado en la hermosa secuencia de Fibonacci que tanto él como sus asesinos... compañeros amaban con valentía.
Finalmente, el cliente se decantó por una idea preconcebida para su logo. Trabajamos en una rediseño que lo dejó muy satisfecho. Una vez más, Hípaso sería relegado al olvido.
Sabía que no podía dejar pasar una idea así.
Esa idea da origen a lo que ahora es esta empresa de Diseño web boutique... que busca las ideas de los emprendedores.
Emprender por supuesto, puede parecer siempre irracional.